martes, 29 de noviembre de 2011

Bendición y Maldición


Bendición


Ojala que me pueda perder y encontrar sin perder un solo diente,
Que mi memoria recuerde los rostros de los que ya no están a mi lado sin tener que mirar una vieja fotografía,
Que el sol de un domingo entrando por en la ventana no me torture después de un sábado oscuro,
Que nunca me falten monedas para volver a casa
Que tu sonrisa me saque todos los males en un segundo
Que un día de estos despierte y no tenga que lamentarme de nada,
Que te pueda mirar en la madrugada
Y me pierda en tus ojos como un cohete en la vía Láctea.




 Maldición

Espero que tus huesos te rechinen por la humedad
Que tu voz se arruine y nadie te escuche,
Que también se caiga tu cabello y tus piernas ya no corran
Que tu lengua se queme al tomar un mate,
Que ruedes por las escaleras, que no puedas dormir ni descansar y que solo tengas tiempo para trabajar, que tu corazón disminuya sus latidos, que tengas todo y los pierdas en un instante, que sueñes y no despiertes.


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